lundi 22 février 2010

Y al final...

Por aquí les dejamos el video del cierre de nuestra boda, esperamos les guste y lo disfruten. Les recomendamos ver hasta el final, hay una parte que les hará reir, ¡se los aseguramos!

lundi 15 février 2010

Nueva vida, nueva imagen...

Después de regresar a este blog, me ha gustado la idea de cambiar de imagen y aprovechando el tema de nuestro pasado fin de semana, me pareció bien incluir ésta foto, que propone un toque un tanto juvenil (¿quién ha dicho que no lo somos?) y que realza un poquito esa nuestra faceta aventurera, y por supuesto lo digo no solo por la nueva vida que emprendemos Denisse y un servidor como matrimonio, sino también por las aventuras que hemos compartido últimamente por estas lejanas tierras, que van desde los cambios climáticos (algo totalmente nuevo para Denisse) hasta las sorpresas que hemos recibido de parte de los hnos. de la Iglesia aquí en Toulouse, y que pronto compartiremos con todos ustedes... muchas gracias por todo y recuerda que cualquier comentario o sugerencia es bienvenida.

La relatividad general...

¿Quién ha dicho que el tiempo no puede ser relativo?, hoy miro en mi pasado y sólo unos segundos exponen los sucesos más importantes de mi vida, tal como una película rebobinada atrás, puede que el tiempo sea realmente relativo, pero añado pensante, quizá lo relativo es lo temporal, juego y rio, por supuesto, cada quien asimila una percepción de acuerdo a su realidad; para mí una sola cosa es importante, estar al lado de Aquél quien controla los tiempos y por supuesto las leyes que les rigen, de una manera diría yo, más allá de lo racional.. ayer una vida, hoy dos que son una.

Desde luego ofrezco una disculpa por tan disparatada forma de introducir esta entrada, cuyo fin solo busca resaltar las virtudes de un Dios de perfecta armonía y paz, en propósitos, tiempos y sazones. Pero finalizo pensando que hoy doy paso a una vida, un nuevo capítulo, una nueva aventura, que sabiente ahora de nuestros desafíos, encomiendo nuestros pasos al eterno Rey, cuya soberanía sobrepasa fronteras, pueblos y lenguas, y agradeciendo ruego también, querido amigo y hermano tener si al menos un pequeño momento en tus oraciones, que tanto han sostenido aquellos vuelos, pues a final de cuentas seguimos siendo tan solo un extranjero con su peregrina...