Extranjero y Peregrino

Ya en casa

Por fin puedo tener un breve reposo y déjenme decir que no hay nada como estar en casita, disfrutando de un rico ponche y descansando luego de todo el viaje. En esta ocasión tengo mucho por agradecer, ya que despúes de haber perdido el vuelo que me traería a México desde Londres, sé que el Señor movió todos los medios para conseguirme otro vuelo ese mismo día (aunque tuvo que regresarme ¡hasta Barcelona!) y quedo asombrado del control tan preciso que posee aún por sobre todos esos sistemas que ni el mismo personal calificado domina con tanta maestría.

Pero ahora si, Denisse y yo nos encontramos afinando todos los detalles que nos restan para el gran día de nuestras vidas y confieso que ahora si empiezo a sentir ese cosquilleo extraño en mi estomago, por lo que nuevamente nos confiamos a quién puede asegurarnos un excelente control.

Pues solo quiero rendir gracias al Señor por esta dicha de traerme sano y salvo a casa y agradecer a todos nuestros familiares, amigos y hermanos que con sus oraciones mantuvieron aquél avión en vuelo hasta su destino. !Muchas Gracias!